¿Y tú, has cumplido tus propósitos de año nuevo?

¿Te has preguntado por qué es tan difícil cumplir los propósitos de año nuevo?, en como la mayoría de las personas que conocemos no logra ser consistente con ni siquiera uno de los 12 propósitos, y en el mejor de los casos, unos pocos logran al menos uno o dos de los 12 propósitos que hicieron en año nuevo y lo mantienen a largo plazo y de forma consistente a través del año siguiente

La tradición de origen Española de finales del siglo XIX es un ritual donde cada uva representa cada mes del año venidero, con la intención de reflexionar sobre los doce meses que dejamos atrás y plantearnos metas para la siguiente vuelta al sol.

Para cumplir un propósito a largo plazo no es suficiente usar la disciplina sin motivación, o que encontremos la motivación mágicamente todos los días en un abrir y cerrar de ojos, estoy totalmente en contra de la tendencia que dice que es necesaria la disciplina antes que la motivación, sin embargo, estoy de acuerdo que la acción llama a la motivación, que tampoco nos será suficiente para la consistencia,  pero hay algo de más importancia que no se ha hablado, descubrí que para se consistente se requiere de obtener un beneficio inmediato a la acción, como sería el tener hambre y al comer saciar, tener sed y beber agua, en un ejemplo práctico, como el mío, el cómo he logrado ser consistente para realizar ejercicio, la explicación es que si queremos ser consistentes pensando en el cuerpo que queremos lograr, lo que sucederá es que en una semana que nos ejercitemos no veremos los cambios y abandonaremos cuando la motivación y disciplina desaparezcan en a lo mucho 3 meses,  en cambio, si tomamos un enfoque diferente como el ser consciente y darte cuenta que el día que te ejercitas y terminas tus ejercicio, sientes como estas de un mejor ánimo y con más energía, incluso te sientes más energizado que antes de hacer tu rutina de ejercicio, lograrás sentir el beneficio inmediato que te produce hacer ejercicio todos los días, y por añadidura verás los resultados en un mejor físico y salud. Esto es un ejemplo, pero cada persona debe saber como interiorizar el beneficio inmediato de la actividad o el propósito por el que haga una actividad, ya sea aprender un deporte donde su beneficio inmediato podría ser el compartir el momento con amigos, el cocinar, que podría ser el tiempo que se dedica a preparar comida deliciosa para nosotros mismos, o aprender un idioma, y su beneficio inmediato en comprender una canción, una película, un texto o lograr comunicarnos con alguna persona.

Para cumplir un propósito a largo plazo y de forma consistente se necesita principalmente encontrar el beneficio inmediato que nos provoca la acción o actividad, esto nos asegura mantener la motivación, y en consecuencia una disciplina sin obligarnos a nosotros mismos, por que logramos descubrir el placer en la acción en si misma, el secreto no está en las uvas ni en el año nuevo, si no en la capacidad de encontrar internamente lo que nos beneficia la acción justo en el momento que la ejecutamos.

¿Estás listo para que este año sea diferente en como planteas tus propósitos?

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